
El síndrome de la silla vacía de Amigas y Conocidas
Cada Navidad, escuchamos hablar sobre el síndrome de la silla vacía, esa tristeza que afecta a los familiares durante las celebraciones cuando quedan huecos vacíos en la mesa. El programa Amigas y Conocidas también sufre actualmente, de un modo muy visual, este síndrome. Ya que los propios espectadores toman conciencia de cómo una de sus colaboradoras nunca más volverá a su silla. El programa ha logrado conectar con una parte del público que observa en esa mesa de colaboradoras, algo muy similar a esas conversaciones que a veces se producen en las reuniones con amigas.